Se analizan diferentes aspectos en la selección y manejo de receptoras, aplicados en programas de TE a campo, en condiciones extensivas de la pampa húmeda de Argentina. Las TE son utilizadas en los programas de mejoramiento genético y aspectos del manejo tales cómo el número de receptoras, el tiempo de utilización, el índice de preñez, abortos, problemas de parto y habilidad materna, que afectan el costo de producción y la eficiencia del rodeo.
FUNCIÓN DE LAS RECEPTORAS
Básicamente las TE consisten en tratar las donantes de embriones con hormonas que inducen la maduración y ovulación de un número mayor de folículos, tratamiento superovulatorio. En el momento del celo, la donante recibe servicio natural o por IA, con el toro superior elegido. Los ovocitos una vez fecundados in-vivo o IN VITRO e iniciado el desarrollo embrionario, entre los días 6 y 8 después del celo o de la fertilización (FIV), son colectados de la cavidad uterina de la donante, aislados y luego transferidos al útero de hembras receptoras en un estadio del ciclo estral (diestro) sincronizado con la edad del embrión, es decir que un embrión de 7 días de edad deber ser transferido al útero de una receptora en día 7 del ciclo (rango 6 a 8 días) para que el embrión encuentre en el útero las condiciones funcionales para continuar con su desarrollo.
El embrión recibe de la vaca donante y del toro padre todo su genotipo y la función de la receptora es incubar el embrión y alimentarlo hasta el parto. Luego, mediante los anticuerpos del calostro y la lactancia, protegerlo durante los primeros meses de vida.
IMPORTANCIA ECONÓMICA DEL RODEO DE RECEPTORAS
Los factores más importantes que afectan el costo de las TE son: el rodeo de receptoras, los resultados técnicos en términos de cantidad de embriones por colecta, porcentaje de preñez, los abortos y las pérdidas perinatales por distocia.
Para el productor el costo mayor de las TE es el mantenimiento de las receptoras hasta que queden preñadas. Este es el factor económico más importante de todo el programa, dada la cantidad de receptoras que implican un capital, ocupan campo, se alimentan y reciben los cuidados sanitarios y de manejo normales.
ESTRATEGIAS DE MANEJO DEL RODEO DE RECEPTORAS
Un principio clave es adecuar el rodeo de receptoras al manejo del establecimiento y a los objetivos del programa de TE.
Los objetivos del programa de TE se pueden definir desde dos puntos de vista:
• Donantes superiores a reproducir: De acuerdo a las necesidades y tendencias del mercado de reproductores, seleccionar donantes cuyas crías justifiquen comercialmente el costo agregado de la operación.
• Cantidad de preñeces de TE por año según: presupuesto, disponibilidad de receptoras, mercado de productos de TE, y acorde con las necesidades de reposición de vientres y toros.
Sobre estas bases se organiza un programa de producción de embriones congelados, que estarán disponibles para servir las receptoras sincronizadas durante la estación de servicios. De esta manera, se reducen costos de tiempo, de mano de obra, y logramos el máximo aprovechamiento de las donantes independientemente de las receptoras y viceversa. Las donantes pueden estar en actividad todo el año sin necesidad de contar con receptoras disponibles o transferir embriones en épocas inadecuadas.
RAZA Y BIOTIPO DE RECEPTORAS
La raza en las receptoras no es tan importante como si el biotipo de animal relacionado con la función y adaptabilidad al sistema de manejo, clima (calor), sanidad (garrapatas) y oferta forrajera local.
La receptora ideal es una vaca joven de 4 a 8 años con cría al pié, criada en el establecimiento y por lo tanto bien identificada, adaptada al medio, con antecedentes conocidos de sanidad, fertilidad, facilidad de parto y habilidad materna.
ORIGEN Y FORMACIÓN DEL RODEO DE RECEPTORAS
Las receptoras “vacas” pueden tener origen en el propio establecimiento, seleccionadas a partir de vacas con cría sin servicio después de los 70 días post-parto. También se pueden utilizar vacas cola de parición y vacas de primer parto destetadas que salen vacías del servicio estacionado.
El problema de trabajar con vacas vacías de servicio con toro, es que estamos trabajando con individuos subfértiles o con problemas sanitarios (diarrea viral, leptospirosis, brucelosis, Campylobacteriosis, Neosporosis, etc.) o con problemas de adaptación al sistema de manejo del campo. Al examen clínico no presentan síntomas de patologías anatómicas o funcionales; y sin embargo reducen los índices de preñez un 20%.
En caso de no tener receptoras del biotipo buscado, se puede iniciar la formación del rodeo con vaquillonas vírgenes mayores de 2 años, para garantizar la fertilidad y evitar los riesgos de distocia en vaquillonas jóvenes. En años sucesivos las receptoras paridas se vuelven a utilizar y la reposición se efectúa con vaquillonas.
EDAD DE LAS RECEPTORAS
En la Tabla 1 se analiza el efecto de la edad de las receptoras sobre el índice de preñez. Las vaquillonas tienen ventajas debido a que consumen menos alimento, tienen mejor respuesta a la sincronización con PG y se obtiene un índice de preñez 5% superior a las vacas. Las desventajas con respecto a las vacas consisten en mayores problemas durante el parto, menor producción de leche durante su primera lactancia y un período de recuperación puerperal más prolongado.
NÚMERO DE RECEPTORAS
El tamaño del rodeo de receptoras utilizadas en un programa anual es aproximadamente de 1,3 a 1,5 receptoras por cada preñez proyectada.
La cantidad de receptoras sincronizadas en una fecha dada, depende de la región, clima, época del año, razas de las receptoras y del protocolo de sincronización utilizado.
En zonas templadas con receptoras Bos taurus (razas británicas, Holstein y continentales) y el protocolo con prostaglandinas se necesitan 1,6 receptoras por embrión disponible, ya que el índice de sincronización es de 70%, el índice de aptitud o aprovechamiento de 60% y finalmente el índice de preñez es de 30 a 35% sobre el rodeo sincronizado.
SINCRONIZACION DE CELOS ENTRE RECEPTORAS Y DONANTES
La sincronización de celos y TE solamente son posibles de aplicar en vientres donantes y receptoras vacías normales con síntomas y signos de actividad ovárica, en buenas condiciones corporales y con un balance energético positivo en la alimentación, que se traduce en ganancia de peso y mejoramiento del estado general.
El aparato reproductor femenino presenta un conjunto de cambios rítmicos anatómicos y funcionales que integran el ciclo estral. Estos cambios se producen por efecto de las hormonas producidas por el eje hipotálamo-hipófisis-ovario y útero. Estas hormonas, además de iniciar el período de receptividad sexual durante el estro o celo, preparan el aparato genital para cumplir con la función de transporte y capacitación del esperma, la maduración folicular y ovulación, la fertilización del ovocito, la formación del cuerpo lúteo y el mantenimiento con éxito de la concepción, el desarrollo embrionario y fetal hasta el parto.
Un embrión de 7 días de edad, en estadio de mórula o blastocisto, debe ser transferido a un útero que esté bajo la influencia hormonal y en un estado fisiológico, motilidad y secreciones, correspondiente a siete días del ciclo estral, con más o menos 24 horas de diferencia (7,8,16,17,21). Este rango o dispersión de los celos permite trabajar el rodeo de receptoras con cierta flexibilidad y aplicar programas de sincronización de la ovulación a tiempo fijo (TETF) sin detección de celos.
Con el protocolo para TETF (Transferencias Embrionarias a Tiempo Fijo), se necesitan 1,3 receptoras, dado que el 70 al 80% de las receptoras podrán ser transferidas, y finalmente el índice de preñez es de 45 a 50% de las vacas tratadas.
En zonas tropicales, utilizando el protocolo con prostaglandinas se necesitan 2 a 2.5 receptoras cruzas de razas índicas ( Bos indicus) con británicas ( Bos taurus) por embrión disponible, debido a que el índice de sincronización de celo es de 60% y el índice de aptitud de 50%. Mientras que con TETF se necesitan 1,5 receptoras por embrión disponible.
AGENDA DE TRANSFERENCIAS
Las transferencias se programan de acuerdo con la fecha deseada de partos y el calendario reproductivo del rodeo.
RODEO ESTABLE DE RECEPTORAS
Este esquema es aplicable en aquellos programas de TE con el objetivo de producir reproductores con diferentes fechas de nacimiento, en tambos comerciales o en cabañas correspondientes con las categorías para concurrir a exposiciones, distribuidas en casi todo el año.
En esta organización las receptoras se van incorporando en la medida de las necesidades, de acuerdo a la evolución del programa. Como norma las receptoras reciben tres oportunidades para quedar preñadas, luego de tres TE consecutivas las receptoras que resultan vacías son rechazadas sistemáticamente del rodeo. En años sucesivos las mismas receptoras paridas se vuelven a utilizar, estimando el 25 al 30% la reposición anual, y el intervalo entre partos en 15 a 18 meses.
MANEJO DEL RODEO DE RECEPTORAS
Para facilitar el manejo y evitar errores, recomendamos alojar las receptoras en potreros separados de acuerdo al estado reproductivo en las cinco categorías siguientes:
• Preparación: todavía no disponibles por falta de condición corporal, edad, desarrollo genital o post parto.
• Disponibles o en sincronización: identificadas con caravana R verde.
• Transferidas: identificadas con caravana blanca o celeste de TE, con los datos de los donantes y el mes de parto en el vértice. Mantienen esta caravana hasta el diagnóstico de preñez, las vacías se cambian a la R verde, y las preñadas mantienen la caravana de TE hasta el parto.
• Preñadas: después del diagnóstico de preñez se juntan en el potrero de las preñadas.
• Parturientas: apartadas el mes antes de parir y vacunadas contra complejo digestivo y respiratorio para prevenir diarreas y neumonías en los terneros.